Este género de frenos puede padecer mayores problemas de sobrecalentamiento y pérdidas de potencia de frenado y de ahí que se han ido dejando de utilizar. Hoy en día se emplean en coches pequeñísimos o de bajo coste, pero únicamente en las ruedas traseras. Sistemas mecánicos, hidráulicos y electrónicos constituyen el funcionamiento de los frenos. El conductor activa el sistema a través de un pedal, esta fuerza que ejerce es amplificada por un servofreno que actúa sobre una bomba de presión. Mediante un sistema de canalizaciones y bombines hidráulicos se accionan las pastillas de freno o las zapatas en el caso de frenos de tambor. No debemos pasar nunca por alto que hay un desgaste de las pastillas de freno.
Y, si bien mimemos nuestro vehículo, las piezas mecánicas se van gastando transcurrido el tiempo y el uso, algunas singularmente si no somos cuidadosos. Uno de esos elementos son los discos de freno, que con el paso de los km acabarán rayados o gastados. La conducción debe ser segura, de ahí que debamos revisar que el sistema de frenado marcha bien.
De Qué Manera Revisar El Estado De Los Frenos De Tu Coche
Comunmente, un juego de pastillas de freno dura solo la mitad, en el momento en que no se realiza también el cambio de discos de freno. Por ende, es una buena opción cambiar los discos cuando te lleves un juego de pastillas de freno. Solo expertos calificados tienen que reportar de qué forma determinar el desgaste de los discos de freno en un caso en particular.
Acopladas dentro de las pinzas de freno, las pastillas friccionan contra los discos para reducir la velocidad del vehículo en el momento en que pisas el pedal. El líquido de frenos es el encargado de sostener altos los niveles de temperatura de ebullición a fin de que el rendimiento sea efectivo y seguro. Si a esto añadimos el uso y los efectos de la humedad, comprobaremos que el punto de ebullición puede bajar un diez% de año en año.
Lo que se acostumbra decir en forma de consejo de sabiduría habitual es que los discos de freno hay que sustituirlos cada 2 o tres cambios de pastillas. Lo que no ya no es una simple aproximación fundamentada en la experiencia de mecánicos y apasionados. Aun de esta forma, suele agradar a muchas personas que no quieren complicarse bastante la vida al tomar esta resolución. En Norauto, te garantizamos una experiencia objetiva del estado de sus discos y pastillas de freno. Nosotros te guiaremos en la elección de los discos y las pastillas de freno adecuados para tu vehículo, te vamos a dar un servicio de alta definición para tu substitución. En el momento en que aparece este ruido se puede deber al desgaste o a un elevado cristalizamiento debido a sobrecalentamiento de las superficies.
Los Síntomas
Lo mejor es que las monedas tienen un grosor muy concreto y medido por el Banco de España para eludir falsificaciones. Conque sabrás cuánto se han desgastado tus discos dependiendo de qué moneda quepa. En este listado puedes ver cuales son las dimensiones exactas de cada tipo de moneda. Para que te hagas una idea de lo que te vas a localizar en el momento en que veas el espesor mínimo, te tenemos la posibilidad de adelantar que los discos acostumbran a tolerar una disminución de entre 2 y 3 mm. Antes de nada, se debe tener claros cuales son los desperfectos que suponen el cambio directo de los discos.
Eludir chocar con otro vehículo, no atropellar a un peatón o no irnos de la carretera va a depender en buena medida de que tengamos la posibilidad detenernos a tiempo de manera segura. La pericia del conductor en estos instantes es fundamental, pero si no va acompañada de un funcionamiento perfecto del sistema de frenos, la maniobra puede acabar en fracaso y, asimismo, en una viable desgracia. Entre los aspectos mucho más esenciales a tomar en consideración en el cuidado de tu vehículo lo encontrarás en los discos de freno. Estos elementos tienen un desgaste considerable en su uso que puede depender del género de vehículo y de tus peculiaridades de conducción. Hoy en dia, casi todos los fabricantes de vehículos indican en la hoja técnica el grosor mínimo aceptable del disco de freno.
Si no cuentas con la ayuda del testigo lumínico que te indica cuándo deber revisarlo, puedes echarles una ojeada tú mismo. Además si al frenar escuchas un chirrido o compruebas que la distancia de frenado es mayor, puede que los discos no estén en su mejor estado. Los frenos juegan un papel primordial en la seguridad de nuestro vehículo y por este motivo, su cuidado debe ser algo más cuidadoso que el que aplicamos otros elementos. Al tratarse de piezas de desgaste, sus componentes van perdiendo su forma y características con el pasar de los años y del uso. Las marcas y los desarrolladores nos aconsejan que comprobemos su estado unos cuantos ocasiones por año si usamos nuestro vehículo de manera habitual. Por ello te mostramos cómo revisar el estado de los frenos de tu coche.
Los frenos son el principal sistema de seguridad de cualquier vehículo y además de esto, asimismo es el más viejo, como cabría esperar. Si las pastillas de freno no se mantienen adecuadamente tienen la posibilidad de cristalizarse o perder su ingrediente de frenado llegando a rayar el disco y acortando, por tanto, la vida útil de este. Hemos de señalar que la inspección ocular unicamente se puede llevar a cabo con el turismo en frío.
Si la parte delantera de la pastilla es inferior a tres milímetros y la posterior está por debajo de los 2 milímetros, deberás reemplazarlas por unas nuevas. Por tu seguridad y para evitar costos auxiliares (discos dañados), cambiarlos rápidamente. Las pastillas de freno se desgastan mucho más de forma rápida y por ende, se tienen que cambiar con más frecuencia que los discos de freno.
En el momento en que sea de este modo, abriremos el capó y localizaremos el depósito del líquido de frenos, que comunmente está en el lado del conductor. Revisar la cantidad que hay se puede realizar a fácil vista observando que este entre los indicadores que marcan el mínimo y el máximo. Si con lo que sea no puedes realizar este examen visual, quita el tapón e introduce una varilla para comprender cuál es el nivel. Para revisar las pastillas de freno tendremos que eliminar las ruedas del vehículo y fijarnos en su grosor. Las fabricantes y los desarrolladores aconsejan cambiarlas cuando les quede menos de un 30%, pero ¿cómo traducimos esto a nuestro sistema métrico decimal?
Para saberlo, puedes ver en el propio disco, porque puede estar impreso en el borde, cerca del centro o en otra parte visible. Si no es de este modo se puede buscar en el manual del vehículo, en la caja donde venían los discos si la tienes o simplemente preguntando en el taller. Asimismo puedes recurrir a foros especializados en tu coche o marca, porque es fácil hallar gente que pasó por lo mismo que tú.
En esta cuestión aparentemente fácil, hay escollos que el conductor sin entendimientos puede pasar por prominente. Asimismo es conveniente lubricar la pinza e instalar pastillas novedosas al substituir los discos de freno. Lo esencial es que tanto las pastillas de freno como los discos de freno encajen con perfección. De ahí que es importante que haya el mayor rozamiento posible, que se consigue teniendo las dos partes de manera perfecta planas y llanas. Para entender si los latiguillos o las pinzas de los frenos han llegado en el final de su historia útil, tendremos que estar atentos al desgaste de las pastillas y los discos.